Rails of Cosmos [Afiliación Élite]

El universo era gobernado por seres llamados Eones, seres de grandes capacidades que se le pueden considerar dioses. Entre todos estos, había diez en particular que sobresalían por todos los demás por fuerza o influencia. Estos eran:

Akivili, “El Trazacaminos”
Fuli, “La Reminiscencia”
Lan, “La Cacería”
Nanook, “La Destrucción”
Qlipoth, “La Conservación”
IX, “La Nihilidad”
Nous, “La Erudición”
Xipe, “La Armonía”
Yaoshi, “La Abundancia”
Long, “La Permanencia”

En antaño los mundos se encontraban separados y pocos tenían constancia de que no estaban precisamente solos en el universo. Sin embargo, eso fue cambiando. Poniendo en contexto un poco, los Eones no solían meterse en asunto de los seres que habitaban en el universo, salvo que eso pudiera traerles ciertos beneficios. Sin embargo, existía un Eón particular: Akivili, "El Trazacaminos". Este creo algo conocido como el Expreso Astral, cuyo objetivo era reunir a seres que gozaran de las aventuras y de explorar el vasto universo. Estos se congregaron en el tren y formaron la primera facción existente o al menos conocida: "Los Anónimos".

Los Anónimos y Akivili, conocido como el Eón más cercano a los mortales, viajaron en el Expreso alrededor de todo el universo, usando los rieles estelares para conectarse con otros mundos. Con el pasar del tiempo, hazañas de los Anónimos y Akivili fueron dándose a conocer por todos los mundos. No importaba que tan distintos fueran, sus viajes lograron conectar una gran cantidad de mundos y no pasó mucho tiempo para que la verdad se hiciera presente en sus corazones: "No estaban solos en el universo".

Con el pasar del tiempo, más facciones fueron creándose en torno a ciertos Eones, con el objetivo de adorarlos y vivir por sus distintos objetivos, o simplemente pasa usarlos para beneficio propio. Entre todas estas facciones estaba la Corporación de Paz Interastral, creada no solo para mantener un orden finalmente en el universo, sino que además por primera vez desde la existencia misma del universo, existiría una economía universal que afectaría a varios mundos, comenzando a haber flujos mercantiles y demás.

Había una paz tentativa. El universo era basto y era imposible que hubiera paz en todos lados, sobre todo porque algunos mundos estaba en su naturaleza simplemente ser ecosistemas duros y hostiles, moldeando así a los mortales que habitaban en ella. Y sin embargo... todo cambió hace exactamente un milenio.

Para poner un poco en contexto. Los eones tienden a consumirse por la propia vía que gobiernan, siendo lo único que los define, y esto fue especialmente lo que le ocurrió a Nanook, el Eón que representaba la vía de la destrucción. Su vía lo dominio y empezó una cruzada universal para causar caos y destrucción por doquier. Para ello, empezó a esparcir los llamados “Estelaron” por el vasto universo, los cuales eran semillas de destrucción y caos que son capaces de provocar cambios en el ecosistema y en la civilización misma de un planeta... para mal. Cuando un Estelaron impacta en un planeta, esparce “Fragmentum”, que es lo que corroe el planeta mismo en si… porque además de provocar cambios en el ecosistema, son capaces de engendrar los llamados “monstruos” del Fragmentum.

Un ejemplo sería Jarilo VI. Antes era un mundo lleno de flora y fauna, verdor por doquier... Hasta que el Esteleron impactó en el planeta y los cambios para mal que provocó, fue una hostil e increíble Era de Hielo que persiste hasta el día de hoy, obligando a los mortales a resguardarse en la última ciudad y bastión del planeta. Ejemplos como Jarilo son varios, porque eso es lo que causa el Esteleron... y la razón por la cual lo llaman el cáncer de todos los mundos.

Akivalli, quien activamente junto a los Anónimos combatían al Esteleron y ayudaban a los mundos necesitados debido a su influencia, desapareció por razones que hasta el día de hoy son desconocidas. Sin su Eón y patrón, los Anónimos intentaron continuar con la labor de su amado Eón, pero el Esteleron contaminaba los rieles estelares y no les quedó más remedio que abandonar el Expreso al cabo de varios años, la facción terminando por disolverse...

A la fecha actual, el Estelaron sigue expandiéndose por los mundos y la Legión, los esbirros de Nanook, causan caos por doquier. La Corporación de Paz Interastral hace lo que puede para contenerlos, pero no da a basto. Además, distintos seres quieren usar los Estelaron para sus propios fines... pero quizás no todo está perdido. Años atrás, una joven Himeko encontró el Espreso Astral en su planeta y lo arregló, surcando el universo nuevamente en el tren. Personas se le unieron y los Anónimos volvieron a resurgir con un nuevo nombre: Los Trazacaminos. Quizás la amenaza del Estelaron nunca cesaría, pero al menos habían personas que estaban dispuestas a ayudar en lo que pudieran a los planetas necesitados...